La reserva online en los alojamientos rurales y hoteles independientes ha aumentado hasta casi el 70% de su reserva total en Europa en apenas tres años. En 2015, ese porcentaje era del 63%, hoy, de siete puntos más. En Estados Unidos, los datos son aún más impactantes: Hace tres años, el 59% de la reserva de los hoteles independientes llegaba vía online. Hoy, ese porcentaje ya alcanza el 79%.

Estos datos, ofrecidos en un informe conjunto entre Phocuswright y trivago sobre la situación de los alojamientos independientes en el mercado online actual, revelan también que los metabuscadores se han convertido en un importante canal digital que permite a los hoteles independientes recibir reservas directas, generando una parte importante (13% en Estados Unidos y 12% en Europa) del total de sus ingresos por reserva de habitación online.

A su vez, un 60% de los hoteleros encuestados considera los metabuscadores como un canal de marketing “muy efectivo”, y un 42% declara tener intención de utilizarlo más en el futuro en su estrategia de distribución.

Asimismo, casi dos tercios de los establecimientos independientes reciben ahora reservas directas desde metabuscadores, y casi un 90% tiene intención de continuar utilizandolos para obtener visibilidad y reservas.

La dependencia de las OTAs

Aun así, y a pesar de la mejora de los resultados online en el sector, la dependencia de las ventas a través de terceros aún es muy alta, sobre todo en Reino Unido, donde las ventas procedentes de las OTAs representan más del 50% de los ingresos por habitación online. En cuanto a la media europea de ingresos desde OTAs es de un 45%. La estadounidense, de un 39%.

El estudio indica, a su vez, que la preocupación principal de los hoteleros en relación con el marketing y la distribución es el aumento de los costes de las reservas a través de terceros, y que un uso más eficaz de la tecnología para incrementar el número de reservas directas puede ayudar a mitigar esta amenaza.

Sin embargo, el 46% de los encuestados afirma que los sistemas son demasiado caros, un 40% declara no tener tiempo para analizar las herramientas y un 35% admite que no está al tanto de las opciones disponibles, por lo que la adopción tecnológica sigue siendo un reto.